sábado, 8 de febrero de 2014

Capítulo 20.

-Anda, vamos. Tenemos clientes que atender. –Louis me soltó, dejándome de nuevo en el suelo y yo entré en mi cuarto para cambiarme. Escuché como Louis se alejaba por el pasillo y, cuando terminé de arreglarme, observé como él ya me esperaba en el salón.
-Y bueno, ¿a qué ha venido el cambio de look? –Me encogí de hombros mientras recogía el bolso y las llaves que estaban en la mesa de la entrada.
-Supongo que necesitaba un “cambio radical”. –Remarqué las comillas y cerré la puerta de mi casa detrás de nosotros. De camino al pueblo no hablamos mucho, sólo lo suficiente, pero incluso así, en silencio, era agradable estar con Louis.
Terminé de cobrar un par de marcos de fotos cuando la melodía de mi móvil comenzó a retumbar por todo el establecimiento, haciendo que Louis y el cliente al que él estaba atendiendo desviaran su atención hasta mí. Miré como el número de mi padre parpadeaba en la pantalla y un leve quejido salió de mi boca.
-Lo siento, tengo que contestar. –Louis asintió y yo entré con prisas al almacén descolgando el teléfono y pegándolo a mi oreja. -¿Qué?
-Lo primero gracias por las últimas informaciones de Zayn y su padre. –Rodé los ojos, lo único que había tenido que hacer era pasearme un par de veces por el barrio de Zayn y decirle a mi padre que todo iba bien, aunque no tenía ni una maldita idea de qué estaba haciendo Zayn.
-Vale. ¿Y qué más?
-Me han informado de que hoy irá a comer con su padre en un restaurante del centro; he comprobado las reservas y es cierto. Tienes reserva a las una para comer allí, intenta que no te vea.
-¿No puedes mandar a alguno de tus hombres?
-No, vas tú y punto final. –Mi padre me dijo con detalle la dirección del restaurante. –No quiero ni un maldito fallo, que no te vean.
-No soy gilipollas… tú, por el contrario, sí. –Hablé lo suficientemente alto como para que mi padre viera que estaba en contra de esto. Me apoyé en la pared y apreté el puente de mi nariz, intentando pensar alguna forma de que no me vieran ni Franklin ni Zayn. Al cabo de cinco minutos, subí de nuevo a la tienda.
-Louis, lo siento, me tengo que ir, es muy urgente. Mi madre…
-Sí, tranquila. Nos vemos mañana. –Le sonreí en forma de agradecimiento, recogí mis cosas y salí con rapidez de la tienda. Arranqué el todoterreno y empecé a conducir en dirección a la capital.

Miré a través del cristal del restaurante y, entre todos los clientes distinguí su pelo negro, algo más largo que la última vez que lo vi. Parpadeé un par de veces, concentrándome en lo que tenía que hacer, y entonces vi mi reflejo en el cristal. Estaba sonriendo como una imbécil, como siempre sonreía cuando lo veía.
“Maldito efecto Malik. Borra esa sonrisa, pareces más tonta de lo normal.”
Reí ante la queja de mi conciencia. En un rápido movimiento me coloqué las gafas de sol y entré en el restaurante con gesto serio.
-Buenas tardes, tenía reserva para uno. Jennifer Green.
-Sí, sígame por favor. –La chica me sonrió y comenzamos a andar entre las mesas hasta llegar a la correspondiente. Estaba a un par de mesas de distancia de la de Zayn, pero podría escuchar con facilidad cualquier conversación gracias a los pocos clientes que había en el local.
Pedí una ensalada mientras esperaba a que Franklin llegara y, éste, no se hizo de esperar, ya que a los pocos minutos ocupaba la silla que había frente a Zayn. Hablaban de partidos de fútbol, del Chelsea y del City, de todo menos de lo que mi padre quería que hablasen. Al cabo de un par de minutos hablaron de un viaje a ver a la familia. Irían a Italia. De repente todas las imágenes de nuestro viaje a Italia se sucedieron una a una en mi cabeza. Sentí como mis ojos se llenaban de lágrimas y, tuve que respirar hondo y contenerme, para no dar una escena en el restaurante. Pedí la cuenta y en un par de minutos ya había pagado y estaba lista para irme.
“Vamos lárgate, no están hablando de nada importante.”
“Pero a lo mejor ahora hablan algo de la mafia. Voy a esperar un par de minutos más.”
“Vete, corres el riesgo de que te descubra.”
Iba a levantarme, hacer caso a mi cerebro y lárgarme de allí cuando el móvil de Zayn sonó, haciendo que toda mi atención se centrase entonces en la conversación que iba a mantener. Duró dos escasos minutos, pero me pareció eterna. Él sólo decía que iría, y que en diez minutos estaría ahí. Parecía serio a la hora de hablar, así que supuse que sería algún asunto importante.
“¿Ahora tienes que seguirlo?”
“Eso parece.”
Suspiré para mí misma y observé como se levantaba, alejándose de la mesa con agilidad y se despedía de su padre con un rápido apretón de manos. Fingí buscar algo en mi bolso cuando pasó a mi lado y respiré hondo cuando salió del local.
“¡Mueve el culo, coño!”
Me levanté con demasiada prisa, recibiendo la mirada extraña de un par de camareros. Le sonreí y salí, acelerando mi paso, del restaurante. Observé como Zayn iba con tranquilidad, paseando por Londres y decidí seguirlo a una cierta distancia. Analicé cada movimiento que hacía e intentaba ocultarme entre la gente por si acaso sospechaba que alguien le seguía, pero en ningún momento pareció percatarse del detalle.
Entonces vi como levantaba la mano y saludaba a alguien. Enarqué una ceja e intenté acelerar el paso para averiguar a quién saludaba con tanta efusividad y, ojalá nunca lo hubiese hecho. Una chica morena, algo más bajita que él, se enganchó en su cuello y lo abrazó con fuerza mientras él la abrazaba con las mismas ganas.
“Necesito vomitar.”
Me apoyé en una pared observando con detenimiento la escena. Ella reía por algo que Zayn le había dicho al oído y él, mientras, la miraba con media sonrisa en su cara. Mis mejillas comenzaron a humedecerse.
“Vete.”
Pero no podía moverme, estaba congelada, y no podía dejar de mirar como la miraba, como le sonreía. La mano de Zayn agarró la de la chica y ambos se alejaron del lugar. Y yo, seguía mirando, como se marchaban hablando animadamente.
Suspiré y volví sobre mis pasos hasta mi coche. Había dolido más de lo que creía, muchísimo más. Verlo con otra, abrazándola, sonriéndole… Un largo suspiro salió de mis labios. Arranqué el coche y empecé a conducir por las calles de Londres intentando despejarme. Encendí la radio, buscando una forma de despejarme, pero simplemente hay días que todo va en contra de ti, incluso la música.
It's begun, the feeling that the end has come...
“¿Esto es una broma o qué?”
Aceleré el coche tanto como podía, mientras la canción seguía golpeando con fuerza los altavoces del coche e inundando al mismo tiempo mi cabeza.
And I, I can’t come alive, I want the room to take me under, ‘cause I can’t help but wonder: What if I had one more night for goodbye? If you’re not here to turn the lights off, I can’t sleep…
¿Nunca has sentido que una canción te describe tanto que piensas que la cantan sólo para ti? Pues ese era mi único pensamiento en ese momento, mientras la canción llegaba a su fin.
'Cause I can't help but wonder: What if I had one more night for goodbye?

Y, entonces, una duda surgió dentro de mí, ¿qué pasaría si tuviera una noche más para despedirme?

¡Comentad, bbys! <3

8 comentarios:

  1. Dios sufro a mi también me duele ver a Zayn con una chica que nosea ella Jajaaj
    I love the chapter :)
    Tonta no me des la gracias por comentar q no me cuesta nada ;D

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    1. Jajaja no sufrrrrras! Sí, si las doy porque eres de las poquitas que comenta y ashfkxmkkf gracias <3

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  2. I love itt!!! Me encantaa! Como fueron tus examenes? Al fin te tengo y tenemos de vueltaa fuck yeah! Y una vez mas tus increibles capitulos♥ desde argentina tienes todo mi apoyo ;)

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    1. Me alegro de que te guste! Pues salieron genial :D muchas gracias por comentar bby, un besazo ♡

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  3. Me encanta este cap.Esto se está poniendo muy interesante ajsvdufhsñ Zayn con otra....no lo soporto..jajajja Escribes genial <3

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    1. Graaaaacias cielo, me alegro de que te guste :) y gracias por comentar <3

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