viernes, 18 de octubre de 2013

Capítulo 72

Llegamos al aeropuerto y, después de pasar todos los controles de seguridad, entramos a la pista de aterrizaje.
-¿Avión privado? Qué nivel.
-Lo mejor, para los mejores. –Liam estiró el cuello de su camisa y yo rodé los ojos causando su risa. –Venga sube. –Subí corriendo las escaleras y me encontré con Zayn sentado en uno de los asientos mientras leía un periódico.
-¡Malik! –Salté en sus rodillas y besé su mejilla.
-¿Lista, preciosa? –Asentí y vi como Liam volvía de haber hablado con el piloto. La puerta cerró y él se sentó en uno de los asientos.
-¿Y los demás? –Ambos guardaron silencio y yo me senté al lado de Zayn, que miró fijamente el periódico. -¿Dónde están los demás chicos? –De nuevo ninguno de los dos contestó y yo bufé cabreada. Al cabo de un rato, cuando el avión ya había despegado, Zayn se levantó del asiento y se marchó al baño dejándome sola con Liam. –Vale, ¿se puede saber a qué narices vamos a Irlanda?
-Tienes que ayudarnos en una cosa. –Miré a Liam interrogante.
-Ya sabía yo que había alguna razón de peso y no eran precisamente mis buenas notas.
-Hay un chico. –Me levanté cruzándome de brazos y me puse delante de Liam.
-¿Te has enamorado, Liam? –Escuché la risa de Zayn en el baño del avión y reí en voz baja yo también.
-Simplemente tienes que hablar con él, llevarlo a la parte trasera de la discoteca y pegarle un tiro. –Mis rodillas temblaron y me agarré a un asiento para no caerme.
-¿Yo? Yo no voy a poder. No puedo pegarle un tiro a alguien que no me ha hecho nada. –Liam negó con la cabeza mientras suspiraba.
-Ya lo hablaremos más adelante, enana. Seguro que puedes hacerlo. –Asentí mientras sentía las manos de Zayn en mi cintura y como apoyaba la barbilla en mi hombro.
-¿Estás segura de que podrás? –Me encogí de hombros, pero finalmente acabé asintiendo poco convencida, girándome hasta él, haciendo que nuestros labios quedaran a un par de centímetros. Sonreí y él besó mi nariz para después sentarse en el asiento. Yo hice lo mismo en el mío y, un par de minutos después, el avión tomó tierra.

-Zayn, ¿quién eligió este maldito vestido? –Salí del baño ajustándome la largura del vestido. –No voy a ir a ninguna discoteca sola con este vestido.
-No vas a ir sola. Liam y yo vamos a entrar contigo, solo que te dejamos en la barra y nos separaremos de ti, pero vas a estar vigilada.
-Ah genial, ahora me siento como una fugitiva que tiene que ser también una prostituta. –Volví a estirar mi vestido, él rió y besó mi frente.
-Sólo habla con él un rato, dale confianza.
-Me sigo sintiendo como una furcia barata, Zayn.
-Vamos, estás preciosa. –Rodé los ojos ante su cambio de tema y salimos del hotel. Liam ya nos esperaba en el todoterreno que frenó unos minutos después delante de una discoteca.
-Recuerda que tienes que estar soltera. –Solté la mano de Zayn y Liam me dedicó una sonrisa mientras afirmaba con la cabeza.
Los tres entramos juntos, bajo la mirada de algunas personas pero, al llegar a la barra, ambos chicos desaparecieron de mi lado. Me pasé como veinte minutos en la barra con un Martini que ya no tenía ni hielo.
"Me voy a ir, esto es una pérdida de tiempo, ni si quiera sé quién es el chico." Suspiré cuando vi que un par de chicos se acercaban a mí. "Lo que me faltaba."
-Hola, este es Niall. Yo soy Mike. –Asentí besando las mejillas de cada uno.
-Yo soy Jenn. –Ambos asintieron con una sonrisa; el móvil vibró en el bolso y yo levanté un dedo hacia los chicos en modo de disculpa. Saqué el móvil intentando que no se viera el cañón de la pistola.
"Es el rubio, preciosa. Lo estás haciendo genial." Suspiré, Zayn se iba a cagar después de esto.
Empecé una conversación poco interesante con ambos chicos, hasta que el moreno nos dejó por irse con una rubia que bailaba sola en el centro de la pista. En realidad, el tal Niall me había caído bien, bastante bien.
-¿Quieres ir a una mesa? –Asentí y me levanté del taburete de la barra, siguiendo al chico por todo el local hasta llegar a una zona repleta de mesas. Divisé a Liam y a Zayn en una de las del fondo y ambos me dedicaron una sonrisa, a la que respondí con una mueca de asco. –Voy a por una copa, ¿quieres algo?
-Una cerveza. –Grité por encima de la música y él asintió alejándose de mí. Saqué mi móvil y empecé a escribir.
"Malik, ¿te parece normal? Estás dejando a tu novia sola, con un tío al que no conozco de nada. Eres imbécil."
Su respuesta no se hizo de esperar y me quedé congelada al leerla.
"Calla y sigue el plan. Ya vuelve."
El chico dejó la botella de cerveza en frente de mí. Le dediqué media sonrisa y di un sorbo al mismo tiempo que él se sentaba delante de mí.
-¿Y bien? ¿Es muy normal que vengas sola a las discotecas?
-Busco presas. –Él chico soltó una escandalosa carcajada y elevó una ceja en forma de interrogación.
-¿Presas? ¿Qué eres, una vampiresa o algo? –Asentí dando un trago más al botellín.
-Y ahora que me has descubierto tendré que asesinarte al acabar esta conversación. –Sonreí, aunque la sonrisa se esfumó de mi rostro al pensar en todo lo cierto que tenía esa frase; él me devolvió la sonrisa.
-¿Y tiene la vampiresa un vampiro en casa esperándola?
-No. –Mi voz se volvió fría. ¿Quería que siguiera el plan? Pues lo seguiré. –No tengo a nadie, ni lo voy a tener, por si estás pensando eso.
-¿Hay alguna razón en especial?
-No estoy hecha para el amor. El amor apesta, ¿tú sabes que significa amor? Bien, yo tampoco, sólo sé que es un conjunto de sentimientos que pueden volver loco a cualquiera y que siempre, hay alguien que acaba herido.
-Suenas a chica con el corazón roto.
-Sueno a chica rompecorazones. –Di el último trago a la cerveza y me levanté de la mesa. –Gracias por la bebida. –Recogí mi bolso y mis cosas y me dirigí a la puerta del local.
-Espera. –Me giré al volver a escuchar su voz. –Quizá sólo necesites a alguien que te enseñe a no romper el corazón.
-¿Y ese quien va a ser? ¿Tú? No lo creo. Ha sido un placer conocerte... –Chasqueé mis dedos fingiendo no recordar su nombre. Él sonrió.
-Niall.
-Eso. –Volví a girarme perdiéndome entre la multitud y estaba a punto de salir de ahí cuando alguien agarró mi muñeca girándome hasta volver a ver esos ojos azules.
-Sólo un día. Mañana, te enseñaré Dublín, si no puedo hacerte cambiar de opinión, no volverás a ver mi pelo tintado. –Agarró un par de mechones de su flequillo haciéndome reír. ¿Qué cojones haces Jenn? Recuerda a qué has venido
-Está bien, tienes una oportunidad Niall. Demuéstrame que estoy equivocada. –Niall asintió, besando mi mejilla. Nos dimos el teléfono en unos segundos y salí del local.

2 comentarios:

  1. Eeeeeeh a mi Rubio no le mates que no te ha echo nada hahaha hay mai por q le va a matar ? Si no ha echo nada no ? Jajaj a zayn Malik no le gusta esto jaja estos dos se han llevado muy bien me da a mi .. Jaaj
    Aún q pienses q es una tontería pienso entre semana q queda un día menos para leer tus capítulos y me alegras los findes en serio te lo digo
    A mi me harias muy feliz si haces una mini novela en noviembre jaja bueno pues eso q a mi niall solo amor eeh jaaj
    Un abrazo gigantesco :D

    ResponderEliminar
  2. Si es que Zayn si por él fuera se cargaría a todo el planeta, ts. JAJAJAJAJAJAJA Awww, no pienso que sea una tontería, eres super adorable, jo. <3
    Un besiiiiiii :)xx

    ResponderEliminar